Oda al Libro... (Especial dia del Libro)

Tras la portada misteriosa de tu presentacion,
donde tu nombre oculta muchos misterios;
encuentro la sabia bendita del saber,
la belleza escrita en pequeños trozos de papel.

Pequeño, grande, el tamaño no importa;
Divertido, romántico, a veces violento;
guardas en tus alas la libertad del pensamiento.

Te escribo a ti,
tu que me enseñaste a escribir.
Dedicándote estos versos, 
libres y atentos; buscando alcanzar 
la admiración de tus pensamientos

Jugando con tus alas,
alas del pensamiento;
tu, amigo libro,
me llenas de sentimientos






3 comentarios:

  1. El tiempo pasa, nos vamos poniendo tecnos

    Hay que decir que la Internet y la tecnología han ampliado y generalizado el saber. Uno mismo se da cuenta de que la información disponible es harto bastante y está a disposición de cada vez más personas. Es un bien en definitiva, no podemos sustraernos de ello. Pero hay algo que se pierde, siempre se ganan y se pierden cosas a lo largo de la historia y la evolución cultural. Me dispongo a dar cuenta de aquellas cosas que se pierden porque son las menos evidentes y las más frágiles, las que de alguna manera hay que apadrinar porque son la otra historia.
    Lo veo, y es notable, como las relaciones interpersonales son cada vez más públicas a través de las redes sociales y a la vez más superficiales. Uno no se compromete mucho con el otro. En una conversación por Chat por ejemplo, las relaciones son cada vez más frías, y las reuniones escasas. Cada quien está frente a su pantalla y desde ahí se relaciona. El afecto es posible que esté tomando otro color, ni mejor, ni peor, quizás distante. Lo mismo sucede creo con los libros, la relación con las obras literarias y académicas se está transformando. En la Internet, por ejemplo, la gente sale a cazar una información y no apasionarse con una novela. Los ebooks, por lo pronto, no registran la memoria del lector sobre el soporte, quizás puedan ser marcados, pero no subrayados con el pulso del estudiante o el apasionado. Los libros, en cambio, pueden registrar hasta la huella de sus lágrimas en las hojas… Estamos a caballo de dos edades históricas pienso y me propongo defender la relación de intimidad entre los libros y la gente. Mi argumento es sentimental y no racional, aunque la razón sea la más ponderada siempre. La razón y ya se ha visto, ha sido instrumento del bien y del mal en toda la historia. Por eso me paro sobre el sentimiento, eso que ha sido humus de grandes obras de arte y de expresión humana. ¿Cómo hacer una pintura impresionista con un programa multimedia? La Internet es de amplia comunicación y democracia, pero le falta algo de humano, de calor corporal, de sentir el libro entre las manos y oler el papel. Reitero que quiero apadrinar lo frágil, lo que se va a extinguir y creo que hasta podamos llorar. Estoy llorando, lo estoy. Sí, no es una argumentación válida, racional y fría, es mi simple opinión. Los años pasan y la tecnología avanza, y el ser humano es cada vez más dependiente de eso y menos entre sí. ¡Cuantas manos artesanas se atrofiarán! Temo a lo virtual, a lo sin cuerpo, porque de alguna manera estamos borrando huellas hacia el futuro.

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  2. Preciosos versos!!
    bello espacio.

    Saludos!

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  3. Gracias por sus comentarios amig@s!!!

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