Brillante y clara, siempre asi,
la luz que guia, que ilumina;
la que en la oscuridad cuida tus pasos,
la que en tus sueños te hace soñar.
Clara y sin fin,
deslunbrante y a veces perturbante,
es asi, la luz, la que sigues siempre,
la que deja ver aquello oculto,
lo que sientes y no ves.
Abre el alma y muestra la verdad,
cierra puertas que jamas debieron abrirse
y abre sueños que se hacen realidad.
A la luz que guia,
hija del todopoderoso,
es asi la luz, clara y sin fin.
¡Gracias mama! (A nuestras madres)
Naci de ti,
Abrigado por tu amor.
En la oscuridad, solo la
luz de tu voz
Me guiaba.
Crecí en ti, naci por
ti.
Y llegue al mundo que no
conocía,
Y tú me guias, paciente
y tranquila.
Camine y mis primero
pasos los di contigo.
Aprendí, y aunque a
veces no han sido cosas buenas,
Me has guiado por el
camino para no perder mi destino.
Y cada día aprendo más,
De tus consejos me
alimento,
Y aunque a veces soy un
poco terco,
De tu experiencia poco a
poco aprendo.
Me porto mal, y aun así
me quieres.
Te causo dolor, y aun así
me quieres,
Que tan ciego estaré,
que ver lo que me quieres enseñar,
Mi triste rebeldía no
quiere aceptar.
Pero así me quieres,
Tu madre mía,
Que luchas día a día,
para que yo cumpla mis deberes.
Gracias por tanto y
todo,
Por darme todo sin pedir
nada a cambio,
Nada, nada más que se yo
un buen hijo,
Que sea yo un buen ser
humano.
Gracias mama
Suscribirse a:
Entradas (Atom)