Nos falta tiempo.

Nos falta tiempo.
Si, nos falta tiempo.
Nos falta tiempo para estar juntos,
para hacer las cosas que nos gustan,
para compartir locuras,
para descubrir el mundo.

Nos hemos sumergido en un mundo
que no tiene consciencia,
en un mundo que en su recorrido
aplasta lo que encuentra en su camino...
y nos roba nuestro tiempo.

Ya no hay abrazos eternos,
ni besos sin fin; todo es aprisa,
una beso corto un abrazo sin sentir.
Hasta hacernos el amor se quedo sin tiempo,
creo que hoy lo llamamos rapidin.

Hasta nuestras sonrisas quedan cortas,
las alegría son menos,
nuestras horas juntos son segundos.
Nos falta tiempo, si, sin duda, nos falta tiempo.

Tú, mi flor.

Eres la flor del jardín que no quiero cortar;
solamente deseo acariciarte y regar tus pétalos
con mis besos; disfrutar de tu néctar y cobijarte con mis sueños.

Quiero besar tu deseo, ahí, donde se posan miles de mariposas;
esas mariposas que explotan en mi universo y
llenan de lujuria mis ganas, mis deseos.

Quiero hacerte mía sin cortar tus raíces;
unirme a ti como gorrión que bebe
del néctar de las flores y vuela alegre por los cielos.

Regálame tus flores.

Regálame tus flores,
las rosas mas bellas de tu jardín.
Déjame regarlas con ternura y
arrancar las espinas con pasión.

Arruíname las ideas de salir y haz que me quede junto a ti.
Regálame tus pétalos, todos juntos, no separados,
porque siempre te quiero completa.

Sé mi razón de hacer llover cada día,
sé mis ganas de deshojar mis miedos.
Déjame ser tu jardinero, tu habilidoso cuidador;
quien te riegue de besos por las mañanas
y te alivie las penas del corazón.

Quedate junto a mi,
crece y florece en mis campos, que yo cuidaré de ti.


Su sonrisa

Su sonrisa es la chispa que enciende mi hoguera,
es el calor que disipa el frío.

Su sonrisa es la magia detrás del acto de la vida,
es suave brisa en una mañana de verano.

Su sonrisa es la simplicidad de la belleza y
la complejidad del universo; es fuerza,
es pasión y locura;
es alegría desenfrenada de un alma libre y enamorada.

Su sonrisa me alegra el día,
me llena de paz el alma y
me enamora el corazón.

Ámame...

Destrózame! Que tu cuerpo sea un maremoto sobre el mío;
que mis ganas se hundan en tus abismos; abismos llenos de placer.

Devórame! No dejes espacio en mi que quedé sin
la huella de tus labios, sin la lujuria de tus besos y el fuego de tu cuerpo.

Absórbeme! Deja que penetre cada espacio en ti y
cubre tú mis deseos y mis anhelos. Descubre mi cuerpo desnudo y
la libertad de mis besos ansiosos de cubrir tu cuerpo.

Recorriendo tu cuerpo

Esta noche, quiero estar contigo.
Quiero derrapar en las curvas de tu cuerpo y
estrellarme sin frenos entre tus pechos.

Voy a acelerar hasta el fondo y recorreré
con mis besos todos los rincones de tu anatomía;
te haré mía y me entregaré a ti.

Quiero desnudar tu cuerpo,
luchar contra los broches de tu ropa;
desprender la coraza que cubre tus pechos y
deleitarme llenándolos a besos.

Bajaré por el valle de tu abdomen y
me perderé un poco, en el remolino de tu ombligo.
Seguiré mi camino hasta llegar a la fuente exquisita de tu sexo;
devorarte completa y ser completamente tuyo.

Facilidad de letras

Tenes facilidad de letras.
Los versos emanan de tus
dedos como la corriente de los ríos.

La poesía es la transpiración de
los pensamientos que viven en tu cuerpo.
Ni siquiera sé como responder a la belleza
que ocultan tus versos y los sueños que dibujan tus letras.

Rindo mi sobrero a la sencillez y
profundidad que emana de tu juego
de palabras. Posees el alma loca
de un potro salvaje que corre libre por el campo.

Eres un ser apasionado;
estás lleno de ilusiones, sueños
y pasiones. Un ser joven, poseedor
de una belleza poética y cautivadora.

Secreto

Cuéntame un secreto. 
Un secreto que se vaya guardado en mis labios, 
y se quede marcado en los tuyos. 

Cuéntame un secreto y 
deja que nuestros cuerpos decidan 
escribir otras historias, otros secretos.

Deja que mis labios te cuenten los secretos 
que he guardado para ti y 
déjame descubrir los secretos que llevas 
guardados para mi.

Dejemos que nuestros cuerpos se unan 
y que nuestros labios, sedientos de unirse, 
hablen sin fin y se cuenten secretos.

¿Y qué?

¿Y qué si me gusta ese color negro en sus bellos ojos?
¿Y qué si me enloquecen esos sabrosos labios color rojo?
Labios que calman mis antojos;
Ojos que me dan miradas a manojos.

Ella está presente en todos mis días,
Yo quisiera que en mis noches frías,
En cada uno de mis espacios,
Dándome caricias con su pelo lacio.

Es poseedora de unas curvas fabulosas,
Unas piernas magnificas y hermosas.
Ella doblega hasta al más fuerte,
Llevándolo de la vida a la muerte. ¿A la muerte?
Si, pero llena de dicha y mucha suerte.
Una muerte que esta llena de vida;
Y que no dan ganas de buscar la salida.

Amanecer contigo

Quiero amanecer junto a ti,
porque quiero enamorarme de
lo que hay tras el maquillaje,
de los filtros de tus fotos y
de tus mañanas de desorden en tu cara.

Quiero amanecer junto a ti,
porque quiero que seas lo primero
que vean mis ojos en la mañana;
descubrirte libre y sin armaduras,
tal como tú, siendo simplemente tú.

Quiero despertar junto a ti,
porque quiero perderme en la
profundidad de tu mirada;
quiero descubrirme, de ti,
cada día enamorado.
Verte siendo tú, y sentirme un poco más
enamorado de ti.

Mi pequeño colibrí.

Vuela sobre mi cuerpo, 
habilidoso y tierno colibrí. 
Posa tus besos sobre la flor 
de mis deseos y descansa tu 
vuelo en el umbral de mis sueños.

Toma la miel de mis entrañas 
y hazla tuya; sorbe toda mi ser 
y deja que mis pétalos se llenen 
y cubran con tu esencia; 
la esencia de tus besos, de tus alas y tu vuelo.

Pósate en mi y descansa; 
déjame consentir tus anhelos, 
soñar con tus sueños, reír en tu risa 
y llevarte en mis pétalos a descansar eternamente en mi.

Vuela libre sobre mi, 
enamórame con tu vuelo, 
el aleteo de tus besos y 
la danza exquisita de tu cortejo. 
Tómame en tu danza y 
haz bailar mis pétalos con el canto de tus colores 
y las caricias de tus alas.

Ven y pósate en mi pequeño colibrí, 
que tengo mis pétalos abiertos para que hagas en mi tu nido.

Escribiendo por ti.

Mis letras descansan, 
pero siguen estando ahí. 
Del otro lado de la pantalla, 
yo sigo escribiendo por ti.

En la distancia, sin conocerte; 
en la cercanía siempre con ganas de leerte.
Tú allá, yo aquí; 
distintos lugares, mismo sentir.

Conociéndote en tus letras, 
enamorado de alguien que no vi; 
sintiéndote desde adentro, 
soñando despierto que estoy junto a ti. 

Por un tiempo, o para siempre quizás, 
seré tu manojo de letras; 
quizás tu preferido o quizás no, 
pero seré siempre las líneas 
de una verso detrás de tus sonrisa.

Voy a seguir escribiendo, 
eso no lo dudes; seguiré aquí 
sacando de nuestras letras sus virtudes. 
Seguiré dando a tu rostro un fresca brisa, 
seguiré robando de tus labios una tierna sonrisa.

¿A qué jugamos?

Te busco,
Te encuentro,
Te pierdo,
Me dejas;
Me voy, te vas,
Te quedas,
Te ignoro,
Me ignoras,
Te extraño;
Te sigo,
Te corres;
Me sigues,
Me corro.
Te quiero,
Me odias,
Te odio,
Me amas...
A que jugamos?
Y así va la historia,
Nuestra historia.

Así de simple.

Bese su cuello y su cuerpo se estremeció;
le susurre al oído y su cuerpo se expresó.

Mis besos se ahogaron en sus labios
 y mis labios se ahogaron con sus besos.

Así de corto, así de simple;
y nuestros mundos hicieron conexión.

Tú.

Tienes tú,
esa maravillosa habilidad de
acelerar el pulso de mi corazón,
de entrecortar mi respiración,
de disipar el frío con tu cuerpo abrazándome.

Hay en ti,
esa magia que hechiza mis pensamientos;
quizás sea tu sexo,
tu forma de amar o esa
maravillosa manera de besar.

Descubro así,
que me gustas cada día;
amo tu sonrisa, la inmensidad de tu mirada,
el color apasionado de tus labios,
la figura de tu cuerpo que
rompe los esquemas sociales de la belleza.

Tienes, sin temor a equivocarme,
la luna mas hermosa sobre tu ser;
un sol que irradia hasta el infinito
horizonte y un efecto atrayente
que no tregua a nada.

Ahora bien, embrújame las ganas;
hechízame los deseos y deja que
el tiempo nos sorprenda en su recorrer.

Cuando escribo.

Cuando escribo,
callo las voces que llevo dentro;
expulso sentimientos que
ya no son míos, aunque hayan en mi nacido.

Cuando escribo,
el mundo cabe entre el papel
y la pluma; entre mis pensamientos
y las letras, entre la tinta y los versos.

Silencioso y casi imperceptible,
me adentro en mundos ajenos
sin conocer sus paisajes; despertando
sonrisas y acariciando pensamientos
que nacen como fruto de estos líneas;
se arman rompecabezas inimaginables,
mundos desvanecidos reaparecen
como el fénix y deciden seguir existiendo.

Cuando escribo,
también me enamoro;
me enamoro de la vida,
sus misterios, sus secretos,
cicatrices y aventuras...

Y descubro mundo en la letras
de otros que escriben; mentes habilidosas y
apasionadas, mentes mágicas y enamoradas;
de la vida y de si mismas, de sus letras y su poesía...

Cuando escribo,
el mundo cabe entre la tinta y el papel;
entre un pensamiento y un amanecer.

Así eres.

Eres tan rica, tan sensual y sexy.
Y no lo digo por tu cuerpo,
sino por tus pensamientos,
tus letras y expresiones.

Tienes unos ojos que brillan,
y aunque bellos físicamente,
es la intensidad de su mirada lo que atrae.

Posees también,
unos labios deliciosos,
y no lo digo por su rica forma
y carnosa presentación,
sino por el indudable sabor de
los besos que de ellos han de surgir.

Silueta que enamora,
mas que el cuerpo físico;
silueta que te sumerge en un vaivén
de pensamientos, de sensaciones y deseos.

Eres el sueño libidinoso de
un inocente amante sin musa;
sueño lleno de fantasías e intensos momentos.

Eres tan exquisita,
que posees la capacidad de crear sueños
 húmedos en la inmensa oscuridad.

Perderme, sí.

Perderme a través de tu mirada,
mientras me sumerjo en el aroma de tu cuerpo,
es el idílico sueño de mi existir.

No cabe espacio para olvidarte,
no existe razones para dejar de pensarte.
Eres fuego, eres agua;
eres la fresca brisa en una cálida mañana.

Ella es.

Ella tiene la sonrisa perfecta 
que encaja en mis alegrías. 
La mirada dulce que disipa la 
amargura de mis problemas y 
la luz exacta para opacar mis noches oscuras.

Ella es la fuente de inspiración, 
el motivo de entonar del alma una canción; 
es fuego y lluvia; es noche y día; 
tormenta al despertar y calma al descansar.

Ella es un mar de pasiones, 
un océano de sensaciones. 
Es mi luna por las noches 
y mi sol durante el día.

Es un cielo estrellado, 
una noche de luna llena; 
es un beso apasionado, la primera flor de primavera.

Es la causante de tantos besos,
 tanta ganas y pasiones provocadas.
Es mi musa, mi lujuria, mi diosa, 
mi sumisa, mi rosa... mi verso y mi papel.

Dómame

Dómame. Con ternura y cuidado,
con besos y abrazos, con el hambre
de una fiera y la fuerza de un volcán;
lentamente y sin prisa, dómame.

Dómame en la cama,
en la sala o la cocina,
donde sea, pero que ante ti,
sean mis ganas y deseos, domados.

Dómame, con deseos y pasiones,
con lujurias y sin temores;
tómame y has que mis ganas
se fundan con las tuyas, unidas bajo las sábanas.

Piérdete entre los rincones de mi piel.
Dómame hasta que nuestras almas
queden extasiadas de placer.

Dómame!

Coautoría con Zoe

Fantasías.

Que se entrelacen nuestros cuerpos
y se unan nuestras ganas;
que en un solo momento
se desaparezcan los miedos
y se llene de sudores nuestra cama.

Que vayan a ti, mis deseos
y vengan a mi tus sueños.

Hagamos nuestra realidad
de fantasías y vivamos el
éxtasis de nuestra exquisita anatomía.

Seamos uno, siendo dos;
fundiendo nuestros cuerpos
en un solo instante, una sola pasión.

Ven, acércate

Heme aquí, dispuesto a dar todo de mi. 

Ven, acércate.


Mírame aquí, sediento de ti, 

pidiendo a gritos que vengas por mi.


Heme aquí, hambriento de tus besos,

ansioso de tus labios. 


Mírame y deja caer tu mirada en mi interior; 

ven, te invito a entrar en mi 

y ver el desorden que has causado aquí.


Ven sin miedo, sin temores; 

sin prejuicio y pasados rencores. 
No viviré de tu pasado; 

quiero ser tu presente y tu futuro anhelado.

Ven

Venga usted y vea dentro de mi; 

no verá mas que versos escritos para usted, 

pensamientos que nacen por despertar y verla cada día. 

Venga, y vea que no hay mayor sonrisa 

que aquella que usted produce 

en mi alma y todo mi ser.

Venga, descúbrame; 

desnúdeme el alma y las ideas, 

el cuerpo y los deseos; 

deseos que viven a flor de piel, 

deseos de probar los besos de sus labios rojos, 

deseos de sentir el tacto de su piel; 

piel que enamora y cuenta historias 

infinitas de amor y pasión.

Venga y descubra el universo de pasión 

que usted desborda en mi.

Dame un beso

Dame un beso tan fuerte y tierno 

que haga que tiemblen mis cimientos.

Dame un beso tan tierno, 

que hagas llorar mi alma y brillar mi sol.

Clávame un beso con toda la esencia de tu ser; 

como se da un beso de despedida 

o un beso de reencuentro.

Despréndeme los miedos, 

aléjame la noche fría y clávame 

un beso que prenda la luna mía.

Bello recuerdo.

Es extraño no querer olvidarte.
Y no porque no quiera, sino porque al hacerlo dejaría ir
una bella parte de mi vida; y no por ti, sino por mi.

Porque fui capaz de demostrarme que puedo amar con la misma intensidad.
Porque mi amor por ti, no dependió de ti, sino de mi;
de mi capacidad de darme la oportunidad de amar, de sentir y vivir.

Tú decidiste irte, yo no te puedo detener.
Dolerá tu partida, si. Pero no eres tú mi felicidad; mi hiciste feliz,
pero fue por lo que vivimos y por ser tú al principio.

De todas formas, que seas feliz allá a donde decidas ir.
Yo me quedaré aquí y seré feliz.
Me amaré más para poder amar a alguien más; alguien que sin duda me dará lo mejor de sí
y seremos felices también. O al menos lo creeremos así.

Sigue tu camino, que feliz por ti estaré;
no des vuelta atrás, lo que has dejado debes olvidar.
Sé feliz y deja que yo también lo sea así.

Sediento.

Cierra los ojos y deja
que emerjan nuestras almas
sumergidas en deliciosos deseos.

Deja que estos labios secos,
sedientos de tus besos,
tus labios, el sabor de tu piel y tu sexo,
se humedezcan en el dulce néctar que emana de tu ser.

Sácame de este desierto
y llévame junto a tu oasis.
Déjame humedecer mi cuerpo
y mi ser en el manantial de tus labios,
tu cuerpo y en el delicioso sabor húmedo de tu sexo.

Aférrate a mis ganas de estar junto a ti,
a los sueños que juntos queremos cumplir
y a este sed loca de beber de tu ser.

Ven conmigo, que tengo hambre de ti.

Aprendices de letras.

Escribiendo sin medida,
como si de eso dependiera nuestra vida;
apasionados soñadores, animosos aprendices de poetas;
cada día parimos nuestras letras,
esperando dibujar sonrisas en sus rostros.

Letras van y vienen,
ideas nacen, ideas mueren;
y entre prosas y versos,
nacen con lujuria muchos besos.

Ladrones de sonrisas,
fantasmas sentimentales;
vamos con nuestras letras a toda prisa,
escribiendo para sus sueños celestiales.

Y entre letras y letras,
florece el amor,
florece la esperanza
de algo enternecedor.

De pronto lujurias,
de pronto pasión,
expresando entre las letras,
los sentirse del alma y el corazón.

Siempre tú

Tú siempre sabes como endulzarme el día;
un café, unas letras, unos versos, un te quiero.

Unas líneas al aire, manchando el blanco de un papel;
regando tinta por el espacio, escribiendo a veces sin saber.

Tú siempre me sorprendes, me enciendes y me llevas;
y te quedas conmigo sin dejarme volver a mi.

Eres el interruptor de mis deseos,
me prendes y me apagas, y me vuelves a encender.

Me descubres y juegas con mi mente;
tus letras, palabras vivas sin pronunciarse,
son capaces de llevarme al olimpo de los sueños.

Tú, con tus letras, me sorprendes;
me invades el tímido libido de mi mente,
seduciendo mis ideas y desprendiendo mis deseos.

Tú sabes como endulzar mis noches, un café,
una ducha, cuerpos desnudos y acción en la cama.
Así juegas con mi mente, así juegas con mis ganas.

Simplemente tú.

Y a usted quien le dio autorización 

de adueñarse de mis pensamientos, 

jugar con mis ganas y desordenar mis ideas.

En que momento se adueño de mis deseos, 

se apoderó de mi lujuria 

y se llevo mi cordura; porque sin avisar, 

se adueño de mi tiempo y 

me ha llenado de tanta pasión, lujuria y tentación.

Es usted, simplemente, culpable de mis cambios de humor; 

de estar inerte a volverme un loco sin razón. 


Usted, se ha metido entre mis ganas, 

en las cosquillas de mi sexo y 

los deseos de mi cama. 

Exquisito loco amor.

Despeinada, loca y alborotada; 

así te quiero, mi musa, mi lujuriosa 

diva desenfrenada. 


Junto a ti me agrada el desorden de nuestra cama,
junto a ti disfruto de nuestra 

pasión desencadenada.


Tú, quien me saca de quicio; 
mi diosa, mi estrella, mi vicio.
Así, locamente desquiciada,
locamente alborotada, despeinada,
desenfrenada; así te quiero yo, 

mi loca casi desquiciada.