Escribiendo y con los ojos casi muerto,
ayer busque de entre la gente, aquel recuerdo.
Pareciera como que si las horas no existiera,
el tiempo me come lento y apacible,
con aquella seguridad de que un dia sere
domado.
Recuerdo haberte escrito un verso.
Tenia un poco de todo, de aquello perdido,
de aquello vivido, de lo que quizas fue y no
buscamos mas.
El tiempo, con su paciencia, se llevo todo.
La tinta de mi pluma, la pureza blanca de aquella
hoja blanca que manche con esos versos escritos para ti.
Hasta el tintero se canso y dejo interior vacio y sin color.
La mesa extraña esas noches que vivimos juntos,
la lamparita que ilumina mis noches de poeta,
ha dejado de alumbrar las noches oscuras
que llegan cada vez que el sol se va a dormir.
Un poco de todo a llenado este espacio.
Te extrañe ayer que partistes y dijistes volver pronto.
Yo escribia y me parecia eterna la espera de tu llegada.